"¡No! ¡¡Nooo!! ¡¡¡¡Nooooooooo!!!!!"
Las cuatro de la mañana. Despierto en mi cama empapado en sudor, todo ha sido una pesadilla, menos mal. Pero este insomnio con patas está en la habitación contigua, jugando a la PSP, a pesar de las altas horas de la mañana. No, tranquilos, no es Michael Jackson con su saco de niños, es todavía peor. Mide 1'63, pesa 56 kilos y tiene 9 años. Si, me habéis pillado, es mi hermano pequeño, pero no me diréis que si se os presentara a las tantas de la noche con ese careto a lo "El grito" no se os escaparía una gotita de pís. La cuestión es que el individuo en si es un chivato, ignorante, relamidamente tonto del rábano... cómo se nota que somos hermanos.
Dejad vuestra opinión... e intentad borraros esa imagen de la cabeza.
0 comentarios:
Publicar un comentario